miércoles, 26 de octubre de 2011

Películas Deliciosas 3: Big Night


Película ambientada en los años cincuenta, cuenta la historia de dos hermanos italianos y su lucha por avanzar en norteamérica y de sacar adelante un restaurante en problemas. Primo es un chef brillante, un artista que no se adapta a americanizar su cocina para que el negocio prospere, esta negativa genera un conflicto con su hermano Segundo, el gerente del restaurante. El padrino de Segundo que también es empresario de la cocina Italiana les aconseja que jueguen todo su capital a una carta: hagan una cena maravillosa pretextando invitar a un cantante famoso que nunca llega. La película muestra la elaboración de platos italianos tremendamente apetitosos y preparados a la perfección. Los actores son excelentes (protagonistas:Tony Shalhoub: Primo y Stanley Tucci: Secondo) y las críticas fueron inmejorables, pero no fue una película de gran repercusión comercial, como sucede con las mejores películas norteamericanas.


lunes, 24 de octubre de 2011

Películas Deliciosas (3): Bridesmaids

Comedia que rompe con todos los moldes, escrita y protagonizada por una actriz de las mejores, Kriste Wiig. No se las voy a contar, solo les adelanto que tiene personajes que no son las clásicas mujeres angelicales y encantadoras que encontramos en la  mayoría de las comedias con elenco mayormente femenino. Acá se muestra el costado patético, las reacciones histéricas, las frustraciones que todas algunas vez sentimos y ciertas conductas algo psicóticas pero retratadas con excelente humor y actuaciones simplemente geniales. Respecto a nuestro asunto, la cocina, hay una escena en particular en la que la protagonista prepara un cupcake que es una obra de arte en medio de una crisis existencial. 


jueves, 13 de octubre de 2011

Películas Deliciosas (2): it's complicated


Que hay de delicioso en esta película:

El humor y la capacidad de divertirse en personajes que no son adolescentes estúpidos sino gente madura e imperfecta que vive la vida con pasión.

Alec Baldwim un galán maduro, seductor, en un personaje que inspira ternura.

Meryl Streep, impecable como siempre, interpretando a una mujer encantadora, con sus contradicciones pero con una valentía infinita.

Las escenas con Steve Martin, todas geniales.

Y la frutilla del postre: la pastelería, y la escena en la que Meryl Streep y Steve Martin hacen las exquisitas croissants au chocolat….

miércoles, 12 de octubre de 2011

Mujeres que cocinan- Mi Madre

Cap I La cocina de mi madre.

Bueno, sigan por este pasillo y llegamos a la cocina de mi madre. En esta foto imaginaria yo tengo unos once años. Es un día de semana, hay colegio, y mi madre está en la cocina, algo hierve en una cacerola, ella está de espaldas a mi. Es una situación clásica, no hay ningún cumpleaños en los próximos días, tampoco es jueves por lo tanto no está preparando la cena especial de la semana, la del viernes. Entonces Matilde faltó, o está en casa pero no se siente bien, y mi madre se está ocupando por este día, de las tareas de limpieza del hogar, comida para la familia y lavado de la  ropa de los seis habitantes de la casa. ¿Uds. que piensan? Acertaron, tiene un humor de perros, está indignada, se siente encerrada en una casa que la priva de su libertad, que la aleja de sus tareas o inquietudes y que la somete a cocinar. Mi madre no está cocinando con placer, no está cantando, y tampoco se podría decir que está cocinando con amor.

La casa a la que me refiero no es una casa, es un departamento de unos ocho ambientes con una terraza grande.  Sus pasillos son largos y cada detalle muestra estilo. No extravagancia, tampoco ostentación.
Mi madre es una ama de casa tradicional, se ocupa de la alimentación de la familia y de que todo reluzca, aunque lo hace con ayuda, delega en otra persona las tareas más pesadas; ella dirige y organiza todo.
Y lo hace bien.

Ese departamento ya no existe en mi universo pero lo traje hasta acá solo para tomar algunas instantáneas de mi infancia. Pueden adivinar que  era un lugar muy agradable, decorado con el mayor buen gusto. A mis amigas les encantaba pasar la tarde en mi hogar tanto como a mi vivir en ese lugar.
Mi madre, mi madre es otro tema.

sábado, 8 de octubre de 2011

Mujeres que cocinan - Introducción

Nací  en una familia de mujeres que cocinan. Crecí pensando que todas las mujeres que cocinan comparten  una especial forma de ser. Una sensibilidad y calidez especial, una cierta capacidad de amar. Luego fui creciendo, empecé a observar más de cerca a las mujeres de mi familia y a prestar atención en la forma en que recorrían sus cocinas y también el resto de los ambientes de sus casas.

Me encontré con estilos tremendamente diferentes.

Terminé por concluir que es una relación muy personal y profunda entre una mujer y el acto de cocinar, la que puede o no emparentarla a otra mujer. De acuerdo a las variaciones de esta relación, las cocinas pueden transformarse en lugares mágicos y también en campos de batalla. En refugios cálidos o en espacios peligrosos de los cuales sería mejor huir mientras la cocinera en cuestión, estuviera en plena tarea.

Veamos algunas postales de mi infancia; veremos por lo menos cinco cocinas distintas y una sexta que todavía no existe. Veremos también a muchas personas. A mi madre en la cocina, a mi abuela en la cocina, a Matilde, la señora que ayudaba en casa, y todavía falta.  
                              
Una o dos veces por año, venía Rosa a mi casa. Rosa no era una empleada de mi madre, más bien era una señora añosa que venía especialmente a cocinar delicias de la cocina oriental, para ocasiones y festejos importantes. Era una especie de profesora aunque no se detenía a explicar o a dar clases de nada. Ella venía y cocinaba con una velocidad que ninguna joven alcanzaría, exquisiteces que incluían ingredientes exóticos y por lo tanto caros. Su tarea era la de una experta contratada para desplegar su arte. Mi madre, que no era una tonta mujer, y sabía que si no se paraba al lado de rosa a observar con exactitud cada cosa que ella hacía, algún día lo lamentaría.

La lista continúa. Mis dos hermanas mujeres cocinan, mi tía cocina y también supo tener, en su caso a un experto, al que se contrataba para organizar esas comidas especiales, en las que había que dejar boquiabierta a alguna que otra prima o cuñada.

La lista se completa con algunas de las mamás de mis amigas de la infancia y por supuesto, con Ketty de Pirolo y Doña Petrona (en mi casa todavía tengo los dos tomos de Ketty, y Doña Petrona era la cocinera estrella de la época, si es que no era la única mujer cocinera que aparecía en las revistas).

martes, 4 de octubre de 2011